Vacacionar trae beneficios a la salud de tu cuerpo, la productividad laboral y esta actividad resulta igual de importante que dormir.
Una de las tareas que más disfrutamos y que al mismo tiempo puede resultar estresante, es revisar en el calendario las festividades que se avecinan cada año para saber cuántos días de descanso laboral adicional vamos a tener, y es que alejarnos del escritorio y nuestra silla de vez en cuando no nos viene nada mal, pero ¿realmente sabes qué le pasa a nuestro cuerpo cuando lo alejamos del trabajo?
“Tomar vacaciones, ya sea por el periodo que por ley nos toca o por algún día feriado, por lo general nos alegra y motiva, pero al mismo tiempo nos llena de estrés al sentir que en nuestra ausencia no podremos tener control de lo que suceda y que alguno de los pendientes que tenemos salga mal; en el caso de los jefes, por lo general, piensan que estos descansos retrasan las actividades que se van realizando, pero esto no es así, alejarnos física y mentalmente de la oficina en un periodo de descanso podría resultar más beneficioso para nuestra empresa al contar con colaboradores más productivos y con una mejor salud física”, señaló Paulina Olivares, publirrelacionista de PM Steele, especialistas en mobiliario de oficina.
Es bien sabido que México es uno de los países en los que más se trabaja y menos vacaciones se tienen, a nivel mundial se estima que trabajamos 45.7 horas a la semana y tenemos sólo un mínimo 6 días de descanso después de cumplir un año de trabajo y se agregan 2 días más por cada año, muy por debajo de países como España, Brasil, Italia, Francia, Finlandia y otros que gozan de 30 días por cada año de trabajo.
De acuerdo con el estudio Vacation Deprivation, el 80% de los mexicanos no disfruta en totalidad de sus períodos vacacionales y es común que no tomen sus períodos completos o que añoren más días de descanso.
Físicamente, las vacaciones son tan importantes para nuestro cuerpo como dormir. Este tiempo de descanso nos permite realizar actividades fuera de nuestra rutina de trabajo que por lo general no nos exigen un mayor rendimiento físico y mental. Tomar un período libre nos ayuda a disminuir los niveles de presión arterial, reducir niveles de estrés, aumentar los niveles de energía, en caso de no tener descansos continuos, estamos más propensos a sufrir problemas del corazón y que nuestras defensas bajen.
Aunque no lo creamos, nuestro cuerpo también necesita de un respiro de las sillas, escritorios que utilizamos a diario, ya que si no tenemos mobiliario que nos brinde soporte en los puntos estratégicos que nuestro cuerpo requiere, podemos acumular tensión e incluso dolor en cintura, espalda y columna por las malas posturas y los largos períodos que las adoptamos, lo cual representa un malestar importante sino se trata a tiempo y se adopta una silla o escritorio adecuado.
Cuando salimos de vacaciones, nuestro cuerpo genera dopamina y serotonina, lo que nos hace sentir tranquilos y de mejor humor, ayudando a mejorar el sueño, dándonos un sentimiento de bienestar y sin estrés.