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Más mujeres en cargos directivos

 

Aproximadamente 17 países del mundo cuentan con una mujer como presidenta de gobierno, de estado o ambos (número que se ha duplicado desde 2005 según la Unión Interparlamentaria y las Naciones Unidas).

 

*Por María Eugenia Pistacchia, Country Manager de VON DER HEIDE México

 

Para celebrar el Día Internacional de la Mujer, es necesario hacer un análisis hacia el progreso que como sociedad se ha ido logrando. Las estadísticas reflejan que, no sólo a nivel global o regional, sino también a nivel México, las mujeres han ganado mayor espacio en posiciones directivas.

De acuerdo con cifras proporcionadas en 2013 por International Business Report de Grant Thornton en el que se incluyen empresas cotizadas y no cotizadas, se muestra un incremento de 3 puntos en el número de mujeres en puestos de alta dirección entre 2011 y 2012, con un 24% de media mundial de empresas que cuentan con mujeres en la alta dirección (comparado con un 21% en 2011).

El nuevo milenio nos propone desafíos de diferente índole que requerirán de una participación de las mujeres cada vez mayor y en cargos directivos. No sólo por la diversidad que en sí misma enriquece a las organizaciones en tanto aporta miradas distintas, sino, específicamente porque el aporte de la mujer en estos roles ayuda a moverlas hacia esquemas de trabajo y el desarrollo de una cultura laboral que permita lidiar de mejor manera con una de las grandes dificultades que atravesamos: la conciliación entre el trabajo y la familia.

 

 

 

 

El Índice de Salud Empresarial elaborado por McKinsey reveló que de 100 empresas, aquellas que contaban con 3 o más mujeres en altos cargos (Comité Ejecutivo o Consejo de Administración) obtenían un índice más alto que el resto. En la misma línea, otro informe concluyó que “la proporción media de mujeres directivas era de 7,1% en el grupo de las mejores empresas y de 3,1% en las peores compañías, demostrando el valor potencial de incluir a más mujeres en los equipos directivos.

Por otra parte, en un cuestionario realizado a 145 mujeres en el Centro Internacional de trabajo y familia del IESE, el 68% de ellas considera que el principal obstáculo para su crecimiento en las organizaciones es la falta de representatividad de la mujer en posiciones de dirección. Casi todas coinciden en afirmar que una mujer será más proclive a fomentar e implementar políticas y programas que faciliten la conciliación de ambos ámbitos. En síntesis, en la medida que más mujeres ocupen roles en los que tomen decisiones se podrán generar más y mejores políticas que faciliten su inclusión y promoción, haciendo que el techo de cristal comience a mostrar grietas.

Si bien este obstáculo es una realidad objetiva y de orden práctico, creo que desde lo individual también podemos plantearnos la pregunta respecto a cómo personalmente lidiamos con esto. Veo en las nuevas generaciones mucha más libertad y apertura en ambos géneros tanto para acompañarse en el desarrollo profesional como en la vida familiar. A diferencia de los baby boomers y la generación X, las mujeres millenials están más decididas a apostar a su desarrollo profesional, viven su carrera con mayor naturalidad y buscan el apoyo necesario para cumplir con su propósito.

La invitación es a continuar este camino más allá de las generaciones, en la búsqueda de un equilibrio propio, individual y único que nos haga felices como mujeres, nos permita progresar y aportar al desarrollo de la economía y la sociedad.

 

Ma. Eugenia Pistacchia

 

*María Eugenia Pistacchia, está considerada como una de las más experimentadas líderes en temas de capital humano, desarrollo organizacional, executive search y coach ejecutiva para las industrias automovilística, energética, farma, agroquímica, comercio electrónico, alimenticia y de consumo. Es licenciada en psicología por la Universidad de Belgrano en Argentina, además completó sus estudios como Practitioner en programación neuro-lingüística por la escuela Argentina de PNL y se certificó como coach por el Tecnológico de Monterrey.

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