En Estados Unidos una iniciativa sigue causando polémica, y esto se debe a la instalación de los buzones para dejar a los bebés ‘no deseados’.
Los buzones tienen reguladores de temperatura, además envían alertas a las autoridades transcurridos 30 segundos de que se depositó al menor.
Estos buzones se llaman “baby boxes” y cumplen la función de ser el depósito en el que los padres que no quieren o pueden mantener a sus hijos los dejan para que, posteriormente, las autoridades se encarguen de los menores.
La organización explicó que cuando el bebé esta en el interior, el compartimiento queda sellado.
Solo puede abrirse desde adentro del centro o estación en el que está ubicado el buzón.