En su casa, en la calle, en el transporte público, las mujeres aún son víctimas de la violencia
Las cifras asustan, generan impotencia, enojo, tristeza, pero son reales:
En México, 66% de las mujeres han sufrido al menos un incidente de violencia emocional, económica, física, sexual o discriminación a lo largo de su vida.
Aquí, en nuestro país, 6 de cada 10 agresiones ocurridas en la calle en contra de las mujeres son de tipo sexual.
Más de siete decesos femeninos con presunción de homicidio ocurren cada día en el país.
En el marco del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres que se conmemora este 25 de noviembre, y de la campaña Únete para poner fin a la violencia contra las mujeres y las niñas, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) hace un llamado a los gobiernos, al sector privado, y a la sociedad en general para erradicar la violencia que sufren 2 de cada 3 mujeres en México.
Las mujeres y las niñas enfrentan diversos tipos de violencia (física, económica y psicológica), que van desde los comentarios sexuales y silbidos, manoseos, y violaciones, hasta llegar a la forma más extrema: los feminicidios. Todas estas formas son parte del continuum de violencia que se ejerce contra ellas a lo largo de sus vidas, de manera sistemática y en múltiples formas, tanto en el ámbito privado como en el público.
En México, 6 de cada 10 niñas y adolescentes han sufrido al menos una forma de castigo psicológico o físico en sus hogares. Las principales causas de estas formas de violencia son los estereotipos de género, las culturas machistas, la normalización y la naturalización de la violencia, y la minimización de su impacto. Todos estos factores estructurales perpetúan y fomentan la violencia contra las mujeres y niñas en el país.
Por eso, este año, bajo el lema de campaña “No dejes a nadie atrás: pon fin a la violencia contra las mujeres y las niñas”, la ONU refuerza el llamado a hombres y a mujeres para fomentar una sociedad más igualitaria, ya que no se puede lograr un mundo donde nadie se quede atrás, cuando las mujeres, por el simple hecho de serlo, enfrentan de modo sistemático violencia y discriminación.
Como expresó el Coordinador Residente del Sistema de Naciones Unidas en México, Antonio Molpeceres: “La violencia contra las mujeres y las niñas es inaceptable y se debe erradicar. Se puede y se debe prevenir. Esta pandemia nos convoca a la acción para eliminar todo tipo de violencia contra las mujeres y niñas, incluidas las mujeres refugiadas, las migrantes, las pertenecientes a minorías y pueblos indígenas”.
Desde las agencias de Naciones Unidas en México se hizo un llamado para puntualizar la importancia de intensificar la inversión en la prevención y atención a la violencia de forma efectiva, garantizando el acceso de las mujeres y las niñas a servicios públicos de calidad, erradicando estereotipos, ofreciendo oportunidades igualitarias de desarrollo y empoderamiento (lo cual incluye salario igual a trabajo igual para hombres y mujeres, evitando así una condición de superioridad y violencia económica de los hombres contra las mujeres), y formando a servidores/as públicas y a la población en general.
“Asimismo, reiteramos que es indispensable generar datos y evidencia para orientar políticas públicas efectivas, así como para visibilizar y dimensionar todas las formas de violencia contra mujeres y niñas.
Las agencias de Naciones Unidas hacemos un llamado para que, del 25 de noviembre al 10 de diciembre, durante los 16 días de activismo, las instituciones de gobierno, la sociedad civil, las universidades, el sector privado, las y los jóvenes, y toda la población, se unan a la campaña Únete”
La violencia contra las mujeres no es natural ni tolerable. Iluminemos edificios de color naranja; sensibilicemos a sectores de la sociedad; hagamos actividades en pro del empoderamiento de las mujeres como una forma para responder a esta pandemia; sin dejar a nadie atrás. Es nuestra responsabilidad en la búsqueda.