Por Francisca Saavedra*
El abrazo de fin de año 2019 me hizo recordar cuales eran mis propósitos para el año 2020. Éxitos y solo éxitos.
Todo estaba planeado, pues sería mi año y el cierre de muchas trayectorias estelares del mejor fútbol que se jugaba a nivel mundial con estrellas qué, tal vez, culminarían sus exitosas carreras o decidirían proclamar sus deseos de jugar otros tantos años más. Zlatan, Higuaín, CR7, Messi seguirían marcando el paso y se avecinaba el debut de pequeños adolescentes con extraordinarias habilidades y cualidades que se perfilaban para ser los cracks que los nuevos tiempos demandaban.
Estaba decidida a hacer una relatoría detallada de los héroes del mejor fútbol del nuevo milenio. Figuras que arrastraban la pasión de sus seguidores amantes del fútbol y que representaban ganancias exorbitantes –cifras millonarias de dólares–, para sus clubes, ligas, confederaciones, FIFA y patrocinadores. Seguramente en mis conteos estarían en primera línea los clubes ingleses, españoles, el fútbol italiano que repuntaba y tal vez otro más.
El último mundial había tirado al fútbol alemán, así como el mundial de Brasil lo hizo con el fútbol español; debería poner mucha atención en los equipos y futbolistas franceses, actuales campeones del mundo que seguramente darían de que hablar. Uno de los torneos más atractivos es la Champions en donde se convoca a los mejores clubes europeos. Yo esperaba ver en las finales de este torneo 2020 al Liverpool intentar repetir el campeonato del año pasado, o al Real Madrid, a Barcelona, al Manchester City, al Arsenal o a Tottenham disputando la orejona, pero mis anhelos, como seguramente los de muchos habitantes del planeta, se vieron frustrados y no fue por el fútbol mediocre de mis equipos favoritos, no, a los propósitos de todos los frenó la pandemia de Covid-19.
El coronavirus nos sorprendió a todos. Nos paralizó y a muchos nos tiene viviendo aterrados. Adiós a mi proyecto estelar en cuestiones de comunicación y no sólo eso, el espectáculo que esperaba, por meses, estudiar y detallar estaba totalmente suspendido. Las publicaciones especializadas se dedicaron a contar chismes de los grandes futbolistas, sus costosas transferencias y sobre los escándalos financieros del fútbol. Además se recomendó el confinamiento, el aislamiento cosa que impidió el entrenamiento colectivo y todo lo que requiere el juego de conjunt, como las charlas con el director técnico y entre jugadores.
Total que finalmente se retomó en su fase prácticamente preliminar la Champion con decepcionantes actuaciones de clubes y futbolistas. Estadios vacíos, equipos sin rumbo, directores técnicos histéricos, futbolistas desmotivados y transmisiones por televisión al rededor del mundo con cronistas y comentaristas que aportan muy poco, y en donde la gran mayoría solo grita tratando de contagiar una entusiasmo ausente a todas luces.
Concluyeron las ligas Premier con Liverpool de campeón; la española con Real Madrid; la A de Italia con Juventus, todos estos clubes campeones en sus ligas resultaron un fiasco y fueron eliminadas de la Champions con sus DT haciendo experimentos y sus grandes estrellas sumidos en la mediocridad. La Bundesliga con Bayern Múnich y la liga francesa con PSG ambos campeones y ademas perfilados para jugar la final, pues sus rivales en la semifinales, aunque sorpresivamente llegaron echando fuera a los grandes, solo un milagro haría que Leipzig venciera al PSG de Neymar y Mbape y que Lyon derrote al súper veloz equipo de Bayern lleno de estrellas.
En fin, que ojalá y este tiempo en donde estuvimos retirados del mundanal ruido en todos los sentidos, dejando de cubrir muchas de nuestras necesidades básicas, hasta las actividades relativas al entretenimiento como el fútbol, nos haya dado la oportunidad de meditar que además de reunir estrellas debemos esperar un mejor fútbol, más garra entre los jugadores, nuevas estrategias de los técnicos, mayor HONESTIDAD entre los directivos y un público que con respeto y buena educación regrese pronto a llenar los estadios.
*Francisca Saavedra. Es periodista, durante 30 años trabajó en Televisa, fue corresponsal en Egipto y Australia y su última responsabilidad en esa empresa fue la Dirección de Corresponsales Extranjeros. Fue una de las fundadoras de ECO, el sistema de noticias 24 horas.
