La oficina de propiedad intelectual de la Unión Europea dio la razón a la cadena irlandesa Supermac’s y revocó los derechos de la empresa de comida rápida estadounidense sobre el nombre.
“Supermac’s está encantada de su victoria en la aplicación de la marca y en que se revocara la marca Big Mac que estaba en vigor desde 1996”, dijo su fundador Pat McDonagh a Reuters.