Por Claudia Solera
Hijos de servidores públicos se quedan sin escuela.
Este Cendi ubicado en Río Nazas 151 de la Colonia Cuauhtémoc y que operaba desde hacía cuarenta años al servicio de los trabajadores de la OPR llegó a recibir a 240 niños, sin embargo como la matrícula se redujo a 25 niños, la Coordinadora General de Administración, CGA, a través de su representante Denis Zaharula Vasto, aseguró que como los gastos continuaban incrementándose se había llegado a la decisión de finalizar el servicio de esta “prestación adicional no obligatoria” el próximo 21 de diciembre.
Desde hace una semana, cuando los padres de familia recibieron este oficio en el que se les notificaba que sus pequeños se quedarían sin su escuela, tocaron las puertas varias dependencias para intentar que sus hijos no fueran expulsados de sus aulas a medio ciclo escolar y en época vacacional. Entregaron oficios sin recibir ningún tipo de respuesta a varias dependencias: Secretaría de Educación Pública, a la Comisión Nacional de Derechos Humanos, a Palacio Nacional, a la Jefatura de la Oficina de Presidencia y Coordinadora General de Administración.
En el oficio que recibieron los servidores públicos de la OPR se les pidió comprensión y se les sugirió que a partir de enero de 2019 inscriban a sus hijos en alguno de los diferentes centros de atención o en las Estancias para el Bienestar y Desarrollo Infantil del ISSSTE.
Sin embargo, los padres afectados comentan que el tiempo de espera en alguno de las estancias del ISSSTE para conseguir un lugar para los niños Puede llegar a ser de seis meses.
“Estamos a mitad de ciclo escolar, en vacaciones, qué van hacer nuestros hijos y nosotros sin escuela. Les están quitando un derecho humano, que es el de la educación”, reprochó uno de padres afectados.
En el oficio de la SEP, los padres de familia expusieron que “el servicio del Cendi, el cual usted pretende cerrar de manera arbitraria, fuera de cualquier contexto legal y, sobretodo, sin garantizar de forma alguna la continuidad del derecho humano de acceso a la educación básica para la totalidad de niños que actualmente se encuentran inscritos, limitándose su oficio a sugerir que los niños sean inscritos en otras escuelas”.
Apenas el viernes pasado 14 de diciembre, servidores públicos de la Oficina de la Presidencia de la República, OPR, se enteraron, a través de un oficio, del cierre de la escuela de hijos (en edades lactantes, maternal y preescolar), porque el nuevo “gobierno federal llegó a la determinación de que el costo-beneficio del CENDI (Centro de Desarrollo Infantil) ya no cumple con su cometido”. Y este miércoles comenzaron a desmantelarlo con niños todavía dentro de la estancia, a pesar de que en el comunicado se especificaba que dejaría de dar servicio hasta mañana 21.
Mientras los niños estaban en sus salones, a las 10:30 de la mañana, de acuerdo con fotografía en poder de Soy Mujer y a las denuncias de los padres afectados, por lo menos llegaron cuatro personas a sacar en bolsas negras el material didáctico que los padres de familia de la OPR habían donado anualmente a la Institución para el beneficio de sus hijos.
Les compartimos una conversación entre una de las persona que estaban en el CENDI y una mamá preocupada por lo que sucedía.