Con el paso de los años nuestros amigos peludos crecen y al igual que los seres humanos, comienzan a envejecer. Los huesos y músculos empiezan a debilitarse, las horas de sueño incrementan, se facilita el aumento de peso y las enfermedades pueden presentarse de manera más recurrente.
La longevidad de nuestra mascota está relacionada en gran parte a su raza y talla; de forma general, si tu compañero es de tamaño grande podemos considerar que es un perro senior desde que cumple seis años, pero si es talla pequeña, su vejez llega a partir de los siete años.
A pesar de los factores genéticos que influyen en el envejecimiento de nuestros fieles amigos, podemos prolongar su salud con algunos cuidados.
Ejercicio moderado. Durante esta etapa, el metabolismo de tu mascota suele ser más lento y por consecuencia tienden a aumentar de peso. Procura ejercitarlo diariamente con paseos cortos, de entre 15 y 30 minutos, lo ayudarás a mejorar su circulación sanguínea y a mantener sus articulaciones sanas.
Nutrición óptima y balanceada. Elige un alimento con ingredientes selectos que sea 100% completo, balanceado y con proteínas de alta digestibilidad para cubrir sus requerimientos nutricionales. Esto lo ayudará a tener una mejor salud intestinal, mantener en buen estado tanto músculos como tejidos, promover su salud articular y evitarle futuras afecciones. Una buena opción FullTrust, el alimento súper premium 100% mexicano y formulado por nutriólogos expertos.
Mostrar cariño y afecto. Tu fiel compañero necesita que le demuestres tu amor y cariño de forma regular. Anímalo a jugar en casa, mímalo con frecuencia y proporciónale un área de descanso cómoda, confortable y cercana a ti, para evitar que se sienta triste o aislado de la familia.
Atención a su higiene. Al envejecer, la probabilidad de que tu amigo se enferme aumenta y por ello, las rutinas de limpieza en casa son esenciales para evitar padecimientos bucodentales, dermatológicos, entre otros. El cepillado de sus dientes es muy importante para prevenir el sarro y la pérdida de piezas dentales. Implementa una rutina de baño en días soleados con productos especiales -jabones neutros especializados para perros- y compleméntala con un cepillado suave en su pelaje para remover el exceso de pelo y evitar nudos, esto lo ayudará a prevenir afecciones y sentirse consentido por su dueño.
Mantenimiento de su hidratación. Asegúrate de que tenga disponibilidad total de agua limpia y fresca ya que es fundamental para evitarle problemas de insuficiencia renal o cardiopatías graves. Algunos signos de deshidratación son: pérdida de flexibilidad en la piel, falta de humedad en su lengua o saliva pegajosa y densa. Si los percibes, acude de inmediato con su médico veterinario.
Visitas regulares al veterinario. Una revisión general cada seis meses es importante para prevenir posibles enfermedades o problemas específicos relacionados a su edad, genética, raza o tamaño.
La llegada de tu perro a la edad avanzada no debe de ser sinónimo de sufrimiento o tristeza. Prestar atención a sus cuidados, al igual que mantener una alimentación adecuada a su etapa de vida, harán que se sienta más feliz, sano y le asegurarás una mayor longevidad y mejor calidad de vida.