fbpx
mother and daughter on grass

Carta a mi madre fallecida

Querida mamá,

Hoy, mientras escribo estas palabras, mi corazón se siente lleno de nostalgia y amor por ti. Han pasado muchos días desde que ya no estás físicamente junto a nosotros, pero tu presencia sigue viva en nuestros recuerdos y en el amor que nos brindaste durante toda tu vida terrenal.

La ausencia de tu cálida sonrisa y tus sabias palabras ha dejado un vacío en mi corazón que no puedo llenar con nada más. Extraño nuestras conversaciones, tus consejos y tu apoyo incondicional. Siempre fuiste mi refugio, mi guía y mi mejor amiga. Los momentos compartidos contigo son tesoros que atesoro profundamente en mi alma.

Quiero agradecerte por todo lo que hiciste por mí y por nuestra familia. Tu dedicación y sacrificio para brindarnos una vida mejor incluso después de tu grave accidente no tienen comparación. Cada día, trato de ser la persona fuerte, honesta, inteligente, dadivosa, compasiva y amable que me enseñaste a ser, aunque a veces me resulte difícil sin tenerte a mi lado.

Sé que siempre me alentaste a perseguir mis sueños y a enfrentar los desafíos con valentía. Aunque ya no puedas escucharme, siento tu presencia en cada paso que doy, en cada logro que alcanzo y en cada momento de felicidad que disfruto.

También quiero pedirte perdón por las veces que no fui el hijo que esperabas. Sé que cometí errores y no siempre fui lo que esperabas de mí. Espero que puedas perdonarme desde donde estás ahora, y que sepas que siempre he intentado aprender de mis fallos y mejorar como persona.

Photo by Andrea Piacquadio on Pexels.com

La vida sin ti no es la misma, pero me aferro a los recuerdos para encontrar consuelo en los momentos de tristeza. Sé que debo seguir adelante y honrar tu memoria viviendo una vida plena y feliz. Aunque a veces me sienta abrumado por la tristeza, siempre recordaré tu fuerza y tu amor incondicional, lo cual me ayudará a encontrar la fortaleza para seguir adelante.

Te extraño muchísimo, mamá, y siempre te llevaré en mi corazón. Espero que, dondequiera que estés, sientas mi amor y gratitud. Gracias por todo, por ser mi madre, mi amiga y mi mayor apoyo.

Con amor eterno,

Arturo.

Comenta