Las cualidades que tienen lo deportistas de alto rendimiento son una ventaja importante en el mundo corporativo.
Más de 10 mil atletas de 206 países se encuentran en Brasil para competir en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016, para llegar hasta ese sitio tuvieron que desarrollar ciertas aptitudes superiores al estándar, a través del esfuerzo y la disciplina, no por nada son los mejores deportistas del mundo.
Así que sigamos su ejemplo y apliquemos los consejos que nos da PageGroup, firma de reclutamiento especializado, para lograr el éxito en el ámbito laboral.
Competitividad
Los deportistas olímpicos saben competir de forma leal y sana, para superar sus límites y enfrentarse a los mejores. Busca establecer relaciones de competencia con tus colegas para innovar en habilidades, aprender de ellos y fortalecer tus debilidades.
Tolerancia a la frustración
Los atletas desarrollan la capacidad asombrosa para equivocarse y seguir adelante sin importar lo frustrante que puedan llegar a ser sus errores. Por ejemplo, los gimnastas repiten innumerables veces una rutina sin rendirse hasta alcanzar la perfección.
Puedes enfrentarte a procesos o distintas situaciones frustrantes con las cuales debes aprender a lidiar, evitando que se conviertan en obstáculos para tu desarrollo profesional.
Concentración y control en momentos de presión
Los mejores son aquellos que aciertan en los momentos determinantes sin importar lo apremiantes que sean las situaciones. Los tiradores con arco son el perfecto reflejo de esta cualidad, ellos tienen una sola oportunidad de colocar la fecha en el lugar indicado, y la diferencia entre ganar o perder es cuestión de milímetros.
En tu trabajo sin duda te encontrarás con momentos decisivos en los que tienes una sola oportunidad de acertar, desarrolla técnicas para mantener el control en situaciones de estrés y puedas destacar de los demás. Los pequeños detalles y diferenciadores son los que te harán lograrán sobresalir del resto de los colaboradores.
Pasión y dedicación por lo que haces
Para los atletas olímpicos la diferencia entre ganar o no una medalla está principalmente en el entusiasmo diario, sin importar lo rutinario que sean los entrenamientos. Un claro ejemplo son los clavadistas, competidores que salen de la alberca una y otra vez para mejorar sus movimientos en cada salto.
En tu empleo puedes implementar esta cualidad por esforzarte al máximo todos los días, pues si bien tú no compites por un una medalla, las promociones o la adquisición de nuevas responsabilidades no se obtienen de la noche a la mañana, sino con el trabajo diario y los resultados concretos.
Trabajo en equipo
En los deportes de conjunto los integrantes suman sus esfuerzos para obtener una mejor puntuación, teniendo en claro el rol de cada persona. Las disciplinas que reflejan esta cualidad de forma más clara son nado sincronizado, voleibol, basquetbol y fútbol. En estas contiendas tienen una mayor posibilidad de ganar los que demuestren una gran coordinación, preparación y estrategia.
En tu compañía, y en caso de que coordines un equipo, puedes aprender de estos deportes para sacar el mayor provecho de tus integrantes y obtener los resultados establecidos. Recuerda, la comunicación efectiva es esencial para un buen funcionamiento en cualquier conjunto de profesionales. No olvides aprovechar al máximo las cualidades y expertise de cada colaborador para construir un equipo de alto desempeño.
Paciencia para encontrar el momento adecuado
Deportes como el maratón o el triatlón se caracterizan por ser competencias de larga duración, en las cuales muchas veces el ganador es aquel que mantiene el ritmo y acelera en el momento correcto, mostrando paciencia e inteligencia.
En el mundo corporativo puedes aplicar esta cualidad para buscar momentos de crecimiento profesional en el instante adecuado. Mantén la constancia de tus labores y busca oportunidades de negocio que signifique un éxito para ti, como solicitar un aumento o aplicar a aquella posición que tanto deseas.